21 DISCOS DE 2011
arbirtrariamente comentados
Esta es otra recopilación de mis reseñas publicadas en Ladosis durante el último año -las trece primeras que verás acá abajo, y otras ocho más, totalmente sesgadas y sin ningún orden específico.
Mujercitas Terror Excavaciones
Punk, post-punk, garage y rockabilly con carácter
nihilista y estética oscura que suena desde las sombras del underground
bonaerense. Este trío compuesto por una mujercita, Daniela –bajo/voz- y dos
hombrecitos, Marcelo –guitarra/voz- y Federico –batería-, descargan de manera tan primitiva como
efectiva una energía que muchos nuevos grupos enamorados del lo-fi actual ni
siquiera imaginarían. En su 1er. disco, el homónimo del 2007, le dieron 10 razones
a la crítica especializada argentina para recordar a gente como The Jesus & Mary Chain, The Birthday Party y The Cramps. Con Excavaciones, esos nombres siguen en la memoria, igualmente como un
punto de referencia, no una reproducción. Si los Mujercitas fuesen de Nueva York,
Los Angeles o San Francisco, ya hubieses leído acerca de ellos en Pitchfork.
Desde mediados de la década pasada se han estado
escuchando remixes de este francés en compilaciones de la disquera Ed Banger, pero es apenas este año
cuando saca su disco debut; una celebración donde el ruido se convierte en electro,
glitch, funk, rock y hasta algo de música clásica malandrizada para la ocasión,
todo en línea con la disonancia bailable de Justice, compañeros de sello. Total
es una fiesta eufórica de 51 minutos repartida en 22 temas que vienen empacados
dentro de una portada donde vemos a SebastiAn besándose él mismo para
representar a manera de “chiste serio la relación que un artista mantiene con
su ego”.
My Little Airport Hong Kong is One Big Shopping Mall
El sonido de este dúo ha estado endulzando el aire
desde 2004. Luego de 5 discos sigue haciéndolo con canciones que, al menos a
nivel musical, son alegres e inocentonas, aunque sólo quienes entiendan
cantonés sabrán si las letras concuerdan con ese mood. El twee pop de ocasionales
toques electrónicos que entregan en este álbum mantiene su línea intacta con
canciones cortas, como de costumbre, y simpleza melódica que hace de esta, una
experiencia para todas las edades. A excepción de una recopilación editada en
España por Elefant Records en el 2007 - Zoo is Sad, People are Cruel-, la
distribución de los discos que saca este dúo, se limita a Hong Kong ¿Un acto
máximo del purismo independiente? ¿O un criminal desinterés por parte de
disqueras indie pop? Lo cierto es que existe internet.
Mastodon The Hunter
Los discos del combo metalero de Atlanta siempre han
venido cubiertos por conceptos laberínticos; personas perdidas en la montaña
–Blood Mountain, 2006-, viajes astrales donde participa Rasputín –Crack the
Skye, 2009-, etc, sonando tan elaborados como sus historias, pero siempre con
una fuerza y precisión que nos hace olvidar esas tramas a veces tan complicadas
para entregarnos al cabeceo y demostrar la maestría con la que tocamos nuestra
air guitar. En The Hunter no hay concepto, es una colección de 13 canciones que
no se relacionan entre sí y suenan algo más sueltas, menos compactas, pero
igual de poderosas que su material anterior. Es el disco más relajado de Mastodon, sin que “relajado” signifique
“suave” sino “despreocupado”. ¿Redefine el metal? No ¿Lo mantiene vivo?
Definitivamente.
Gang Gang Dance Eye Contact
A pesar de que la primera canción dure más de once minutos y tenga un intro de cinco que puede sonar a música new age de un planeta por descubrir, el resto de Eye Contact es el punto de iniciación perfecto para los ajenos al sonido de este grupo. Y es que GGD se une a la tendencia actual de músicos experimentales que “experimentan” dándole un carácter más “pop” a su música. Para esta oportunidad usan su percusión característica, sintetizadores y artilugios electrónicos a favor de ritmos bailables que alimentan algunas melodías vocales traídas de Asia y el Medio Oriente. Un disco accesible para los estándares de GGD, que habiendo firmado con 4AD parece apuntar a públicos medianamente más amplios. Lo mejor de todo: su sonido mantiene la autenticidad y sorpresa de siempre.
Planningtorock W
Janine Rostron –AKA PTR- dejó su natal Bolton para
experimentar con la música, visuales y performance en Berlín, debutando en 2005
con Have it All, uno de esos discos que
asustan pero que gustan. Luego de 6 años regresó con W para darnos otra muestra de obsesión artística. Intacta está su
aura oscura e intrigante armonizada por una suerte de música de cámara que ella
se encarga de hacer electrónicamente para alternar con ocasionales canciones de
ritmos bailables. La voz sigue siendo parte integral de su personalidad, esas
múltiples inflexiones que pasan de los agudos a los graves con coros de fondo a
veces punzantes grabados por ella misma no dejan lugar a la confusión. ¿La
prótesis sobre su nariz? Para “jugar con su género”, complementando el concepto
de este enigmático disco.
Shilpa Ray and Her Happy Hookers Teenage and Torture
Sentimiento de cabaret con visceralidad punk. Shilpa,
descendiente india radicada en Nueva York, le da violencia al desamor con una
voz desgarrada que suelta melodías melancólicas y escupe gritos de criatura
salvaje por igual mientras toca el armonio –instrumento de viento con teclado,
parecido al acordeón-. Acompañándola con guitarra, bajo y batería están sus
Happy Hookers, que ni son hookers sino hombres, ni están felices sino
encabronados como ella, así lo demuestran en canciones como Stick it to the
Woman, Liquidation Sale o Erotolepsy, donde la agresividad es la norma a seguir.
Este, su 2do. disco, corre en 50 minutos llenos de punk, blues y actitud
garajera, confirmando las alabanzas de Nick Cave en una entrevista hace un par
de años en la web del periódico canadiense National Post.
The Decemberists The King is Dead
Cada disco del grupo de Portland comandado por Colin
Meloy ha sido como una banda sonora para libros de cuentos estadounidenses de
antaño escritos por él mismo. Un folk teatral que con su anterior trabajo, el
conceptual Hazards of Love -2009-, subió
los decibeles de su sonido acústico con intensidad de guitarras enchufadas y
acercamientos al rock de estadios en los 70’s. Esta vez las cosas se calman
bastante para ofrecer un despojado folk con recurrentes cadencias country; una
de las influencias de Meloy en esta oportunidad, además de R.E.M., por eso
invitó a su guitarrista Peter Buck –guitarra y mandolina en varias canciones de
este disco-, para acercar su sonido al de los veteranos de Georgia en los
momentos más minimalistas del disco Reckoning
-1984-, como Meloy afirma en una entrevista.
Deerhoof Deerhoof Vs. Evil
Muchos artistas avocados a la experimentación de
poca accesibilidad para públicos amplios han cedido en los últimos años ante estructuras
y melodías más universalmente digeribles. El cuarteto de San Francisco se une a esa
tendencia, ofreciendo un disco que, grabado y auto-producido de manera casi
improvisada, se apega a un sonido que, sin dejar de lado su particular marca,
se convierte en algo más “pop”. Alternando caricaturescas explosiones de ruido blanco
con riffs rockeros y temas que presentan la tranquilidad de guitarras
españolas, junto a canciones que podrían ser el soundtrack de una película avant-garde
de espías perdida en los archivos de los 60’s. Deerhoof Vs. Evil, podría ser el
comienzo de la exploración por parte de nuevos seguidores del grupo para ir
adentrándose poco a poco en su intrincada trayectoria.
Varios Artistas CUU Desde el Espacio
¿Qué es lo primero que piensas cuando
nombran la ciudad de Chihuahua? Si respondiste que toda una movida musical
independiente, es porque ya escuchaste algunos de los grupos del sello CUU
Desde el Espacio. La cantidad de artistas con expresiones musicales
alternativas que se concentra en esa ciudad mexicana es toda una revelación
para quienes sólo se predisponen a esperar música norteña u otras corrientes
tradicionales. Esta recopilación recoge temas de 17 grupos y solistas entre los
que destacan The Mueres (post-punk), Gay Duo (punk), Fitness Club (synth-pop),
La Revolución de José Luis Esparza (post-rock) y Sinister Sister (Lo-Fi folk),
por nombrar sólo algunos y ahorrarme varios caracteres. Así reclama Chihuahua
su lugar dentro de las capitales musicales cosmopolitas de Latinoamérica.
The Dirtbombs Party Store
Con dos baterías, dos bajos, la guitarra y voz negra
de Mick Collins, este combo de Detroit, se ha caracterizado por su ruidoso y
crudo garage rock. Ultraglide in Black
-2001-, su 2do. disco, transformaba canciones soul y motown de sus “hermanos”
preferidos de los 60’s y 70’s, en un ataque sonoro de antología. En esta
oportunidad también ofrecen una colección de versiones, pero muy distintas: del
electro y techno nacidos en la “ciudad
motor” a finales de los 80’s y principios de los 90’s, logrando recrear con
eficacia, y a su manera, la bailabilidad
de temas tan fríamente sintetizados usando su ya legendario arsenal de
instrumentos no electrónicos y poniéndolos al servicio del tributo a Dj’s y
productores que poco tenían que ver con el rock. Party Store, es para cabecear
y bailar a la vez.
Girls Father, Son, Holy Ghost
Haber sido criado en un entorno bizarro ayuda a darle mística a la personalidad de Christopher Owens, letrista, guitarra y voz de este dúo radicado en San Francisco, cuya otra mitad es el multi-instrumentalista JR White. Viviendo en una comuna de fanáticos religiosos alienados hasta los 16 años, Owens deja Eslovenia -donde la comunidad nómada Children of God, a la que pertenecían sus padres, estaba radicada en ese momento-, para mudarse a Texas y comenzar otro peregrinaje, ahora musical. Album, su disco debut del 2009, se convirtió en referencia instantánea para la comunidad alternativa, por lo que habían expectativas respecto al siguiente disco. Con un aura más íntima y preciosista que realza el carácter autobiográfico que encierran estos nuevos 11 temas, la atmósfera provocada por canciones como Vomit, Magic o Forgiveness, sigue estando impregnada por la narcosis a la que el dúo se somete cuando compone y graba -y cuando no también-. Pero al mismo tiempo el sonido logra mayores dimensiones por los ahora más abundantes arreglos de guitarras españolas, teclados y coros femeninos entre gospel y soul. Luego de su escalada al Monte Hype a finales de los 00's, los 10's se presentan como una década prometedora para Girls.
St. Vincent Strange Mercy
Luego de unos 3 años ofreciendo su talento musical para colaborar con The Polyphonic Spree, Sufjan Stevens y Glenn Branca, la nativa de Oklahoma mudada a Nueva York, Annie Clark, se independiza en 2006 para demostrar también su talento como escritora. Con letras confesionales que sin embargo no la dejan expuesta, los sentimientos depositados en este, su 3er. disco, siguen paseándose desde la frustración a la esperanza haciendo varias paradas intermedias. Su cabeza continúa dándole vueltas a sentimientos confusos que giran en torno a las relaciones humanas mientras su pie pisa la pedalera de su guitarra para darle efectos y tensión al momento, pero en esta oportunidad dicha tensión queda sólo como complemento de lo que hasta ahora es su disco más variopinto y cuidadosamente producido.
La Casa Azul La Polinesia Meridional
A Guille Milkyway le encanta el euro-trash, el french y j-pop, el disco music y la electrónica cercana al chiptune. También es un tímido confeso, por eso desde que arrancó su aventura musical a finales de los 90's con La Casa Azul -del cual es el único miembro, decidió no ser el protagonista en sus conciertos, no aparecer en los videos y reducir al mínimo sus entrevistas. En su lugar, darían la cara 3 hombres y 2 mujeres que al mejor estilo sesentoso del tipo Archies, harían las veces de un grupo en el que "tocaban" guitarra, bajo, teclados y batería mientras cantaban. Con 2 discos; Tan Simple Como El Amor -2003- y La Revolución Sexual -2007, la imagen del "grupo" fue evolucionando; de jóvenes con imagen colorida, pulcra e inocente, a "androides" vestidos con prendas retrofuturistas que eran "controlados" por Guille, quien cada vez estaba más presente, tanto a nivel de videos, como de material promocional. Por eso ya muchos sospechábamos que para el 3er. disco nos despediríamos de aquellos 5 personajes para ver sólo al retraído barcelonés. Y así fue, ahora la música mascachicle de altas velocidades y aura alegre que combina programación de bajos funkies, bases electrónicas, casi siempre de carácter bailable y letras que hablan de alienación, amor y desamor, giran totalmente alrededor de su artífice, quien luego de más de una década de actividad debe haber superado su timidez. Sin embargo a nivel sonoro los cambios son pocos, cualquiera de estas nuevas 13 canciones pudiesen fácilmente haber formado parte de sus 2 larga-duraciones anteriores, pero las habilidades, tanto melódicas y líricas como a nivel producción, mantienen este nuevo disco lejos del aburrimiento-por-repetición y lo convierten en una cálida extensión de la personalidad del Guille.
Krista Muir Between Atoms
Durante la primera mitad de los 00's, la canadiense Krista no era conocida por su nombre de pila sino por su alter ego: Lederhosen Lucil, quien, con acento alemán falso y apariencia estereotipada también teutona, alegraba a quien tuviese la suerte de escuchar sus equipos electrónicos vintage al servicio del hip-hop, country, synth-pop o rock. Varios singles y 2 discos; Hosemusik -2002- y Tales From The Pantry -2003-, fueron los responsables que me enamorara musicalmente de ella hace ya casi una década. Pero luego de su 2do. disco desapareció sin dejar pistas de qué vendría después... o más aun, si vendría algo después. Pasaron 4 años hasta tener noticias de nuevo material -periódicamente consultaba su página. Fue entonces en 2007 cuando bajo su nombre real, Krista Muir, lanzaba Leave Alight. El hecho que su alter ego comenzara un hiato musical significaba que ahora el carácter novelty de su música cedería paso a una colección de canciones más instrospectivas; Las claras referencias humorísticas de Lederhosen Lucil ahora abrían espacio para la contemplación etérea de Krista, con un sonido ligado al folk que, girando alrededor de un ukelele, lograba mostrar otra faceta de la artista. El año siguiente seguiría ese camino con el evocador Accidental Railway y ahora lo reafirma al regalarnos otra colección de bellezas sonoras en el adorable Between Atoms. Las 10 piezas que componen este disco son una adición de altura al particular y colorido catálogo de la nativa de Ontario, quien con canciones como Marysburgh Vortex o la que titula el álbum, por nombrar sólo algunas, despliega niveles de belleza que exceden el límite legal. Para esta ocasión dejó filtrar algo de la graciosa candidez de LL en la mezcla; canciones como Tired Angels y Ultraviolet Eyes, con las características tonadas y percusión de su tan querido Yamaha PSR-180 -que un amigo le regaló en alguna navidad de los 90's, traen a la memoria el sonido de la prankster alemanizada que sigue de vacaciones hasta nuevo aviso. Love you, Krista/Lucil.
JazZstePpa Hyper Nomads
Recuerdo que hace un par de años mi simpatía por el dubstep era nula, no me gustaba nada de lo que había escuchado porque se me hacía insoportablemente aburrido y snob. Por aquella misma época vi en alguna página por ahí el nombre de este combo, era obvio que hacían dubstep, pero la palabra jazz me despertó la curiosidad suficiente como para bajar el disco homónimo. No fue sólo el trombón y la batería lo que me convenció, sino también el sonido denso y oscuro que no le había escuchado a otros productores del género. "Now we're talking" pensé, y así le abrí mis puertas al dubstep... o al menos a cierto tipo de. Con Hyper Nomads subieron su barra -el hecho que la 2da. canción se llame Raising The Bar no debe ser casual. Desde que sonó Baby Jesus, la 1era. canción, ya sabía que las siguientes 24 iban a provocarle a mis dos amigas JBL un sufrimiento que sería directamente proporcional a mi satisfacción. Desde la euforia ragga de la mencionada Raising the Bar hasta la feliz justificación jazz de Rusty Trombone, pasando por el folk centroeuropeo de Do U Lov_Me, no hay desperdicio en este disco, ni siquiera en los interludios. El uso y abuso del wobble es la clave que mete a este disco en la nueva dirección que han tomado varios artistas del género y JazZstePpa sabe muy bien como hacerlo oscilar para sacar provecho de él.
Black Lips Arabia Mountain
Uno de los discos más sonados en mi soundtrack de 2011, Black Mountain fue una revelación inesperada que ayudó a grabar en mi memoria algunos de los momentos más divertidos de ese año. Firmados por Vice Records luego de lo que hasta entonces fue su mejor disco; Good Bad Not Evil, cuyo título que siempre me trajo a la memoria el Give Him a Great Big Kiss de mis queridas Shangri-Las, hasta que leyendo una reseña por ahí pude ver que de hecho era referencia de esa canción, por lo que le agarré todavía más cariño a ese disco... pero volviendo al tema Vice; los firmaron y sacaron el insípido 200 Million Thousand en 2009. La disconformidad de la disquera por haber perdido esos reales los llevó a comisionar al productor Mark Ronson -Amy Winehouse, Adele, Robbie Williams, etc, -¡¿?!- para darle un extreme makeover al sonido del grupo y salvarlos de la repetición. Santo remedio: 16 canciones de las cuales cualquiera podría ser un single promocional -exceptuando You Keep on Running. Pegajosas, tarareables, divertidas y 100% libres de pretensiones. Los Lips y Ronson tienen claras las limitaciones del grupo -virtuosismo musical, y sus fortalezas -espontaneidad y acabatrapismo. Por eso Black Mountain, a pesar de no aportar nada nuevo a la música, merece estar en muchas listas que resuman los mejor del 2011 en el departamento rockanrrolero. ¿Highlights? escúchalo en shuffle y lo encontrarás... bueno, ok, si cae You Keep on Running el highlight es la que caiga después.
Celebration Hello Paradise
Cuando una disquera firma a un grupo o solista que al final no termina siendo rentable, le rescinden el contrato y adiós. En el caso de la disquera 4AD y el grupo Celebration fue al revés; luego de ver con lógica frustración cómo sus dos primeros discos pasaban bajo los radares del reconocimiento público, el hasta entonces trío -luego se incorporarían invitados ocasionales, de Baltimore, decidió no continuar su camino con 4AD, no por desacuerdos ni fricciones, sino para lanzar su disco independientemente y a través de descarga gratuita en su web -de verdad verdad, esto no fue una estrategia promocional tipo In Rainbows. Les sirve además para relajarse un poco y no pasar por la presión, a veces auto-impuesta, de tener que retribuir con ventas el esfuerzo de una disquera que siempre ha creído en ellos. Además, David Sitek -TV on the Radio, como si hiciese falta aclararlo a estas alturas, pasó su testigo productor al grupo, quien ha logrado filtrarle a su ya místico sonido, un halo de majestuosidad que eleva la experiencia sonora y nos lleva a fundirnos con su psicodelia. Sítaras, pianos, percusión masiva, sintetizadores escondidos y por supuesto, la voz de Katrina Ford; desgarradoramente soul y engañosamente negra, hacen que las 9 canciones de Hello Paradise se conviertan en un corto trip de 38 minutos.
Dave Nada Blow Your Head Vol. 2 - Dave Nada Presents Moombahton
El sobrino de Dave Villegas estaba en edad escolar en 2009 y organizó una skipping party, que no es más que un matiné en la que un grupo de estudiantes falta a clases para divertirse en el garaje de una casa tomando alcohol y bailando. Le pidió a su tío, dj de oficio, que se encargara de la música para entretener a sus amiguitos teenagers. Aceptó con gusto. Primero ellos pondrían algo de música para que un rato después se montara tío Dave. Luego de un rato viendo cómo los mocositos bailaban reggeaeton -todos eran latinos, le tocó el turno al único adulto presente de colocarse detrás del display y hacer que siguieran bailando, pero... él sólo tenía discos de house, un género que obviamente iba a ser un bajón para el público presente que tan bien la estaba pasando a punta de perreo. Intentando que la diferencia de estilos se notara menos, decidió bajarle el tempo a la música que con tanto esmero había elegido para divertir a su sobrino y compañia, logrando unos beats cercanos al reggaeton. Así nació el Moombahton en aquel garaje de Washington. Para presentarle al público la diversión de este género, se lanzó este disco, cuyas canciones han sido elegidas y convertidas en set por Dave Villegas -Dave Nada. South Rakkas, Datsik, Tittsworth y Nadastrom -dúo que tiene Dave junto a Matt Nordstrom, son algunos de los productores que inspirados por Nada, han incursionado en el género y están presentes en el neo-sandungueo que ofrece este disco desde el principio hasta el final, final que significa un broche de oro con la aparición de Lizzie Bougatsos, vocalista de Gang Gang Dance en la canción Releaserpm, original de Win Win con remezcla de Nadastrom.
Man Man Life Fantastic
Quien conozca la divertida demencia de este combo Philly estará de acuerdo conmigo cuando digo que son todos unos ENTERTAINERS que saben cómo mezclar magistralmente la balanza entre música y performance. No es sólo el hecho que su concepto y conciertos sean una especie de experiencia carnestolenda sobrecargada de información vista desde la óptica de unas pupilas dilatadas, sino que la ejecución de sus (múltiples) instrumentos -xilófonos, acordeones, violines, pianos, percusión, guitarras, efectos electrónicos y un sinfin de artilugios musicales más, resulta igualmente intoxicante, halándonos del brazo para meternos en la atracción bizarra de una especie de circo noir donde el vaudeville va de la mano con momentos que terminan siendo más dark de lo que podemos apreciar en la superficie. Como en muchos otros discos de este año, la producción dio como resultado un sonido más limpio que sus entregas anteriores, con más detalles y menos saturación. Pero, para alivio de los que nos consideramos seguidores, los momentos caóticos y esquizoides siguen presentes, de otra manera no serían Man Man.
0,8syooogeki 1 Bo 2 Bo 3 Bo 4 Bo 5 Bo 6 Bo, Toyo Techno
El nombre de este dúo significa: 0,8 Segundos Para el Impacto. El nombre del disco: Ráfaga 1, Ráfaga 2, Ráfaga 3, Ráfaga 4, Ráfaga 5, Techno del Lejano Oriente. Todo podría sonar aún más rebuscado de lo que ya es si no se tratase de nipones, pero ya sabemos que por allá las mentes trabajan de manera diferente, como queda de manifiesto cuando escuchamos las canciones de estos dos tokiotas; un rock fracturado de tiempos acelerados que constantemente cambia de dirección, haciendo que cada tema tenga al menos 5 partes con variaciones de ritmos/velocidades junto a voces femeninas y masculinas que se alternan, todo esto cortesía de JM, la modelo-convertida-en-cantante y el multi-instrumentalista Tōyama Tadaomi. Los ritmos rara vez son lineales, y cuando lo son, duran menos de lo esperado para darle paso a otros distintos en los segundos siguientes. Así se suceden las nueve canciones, de manera aparentemente anárquica, pero realmente preparada y practicada.
Cada disco del grupo de Portland comandado por Colin
Meloy ha sido como una banda sonora para libros de cuentos estadounidenses de
antaño escritos por él mismo. Un folk teatral que con su anterior trabajo, el
conceptual Hazards of Love -2009-, subió
los decibeles de su sonido acústico con intensidad de guitarras enchufadas y
acercamientos al rock de estadios en los 70’s. Esta vez las cosas se calman
bastante para ofrecer un despojado folk con recurrentes cadencias country; una
de las influencias de Meloy en esta oportunidad, además de R.E.M., por eso
invitó a su guitarrista Peter Buck –guitarra y mandolina en varias canciones de
este disco-, para acercar su sonido al de los veteranos de Georgia en los
momentos más minimalistas del disco Reckoning
-1984-, como Meloy afirma en una entrevista. 
Cuando una disquera firma a un grupo o solista que al final no termina siendo rentable, le rescinden el contrato y adiós. En el caso de la disquera 4AD y el grupo Celebration fue al revés; luego de ver con lógica frustración cómo sus dos primeros discos pasaban bajo los radares del reconocimiento público, el hasta entonces trío -luego se incorporarían invitados ocasionales, de Baltimore, decidió no continuar su camino con 4AD, no por desacuerdos ni fricciones, sino para lanzar su disco independientemente y a través de descarga gratuita en su web -de verdad verdad, esto no fue una estrategia promocional tipo In Rainbows. Les sirve además para relajarse un poco y no pasar por la presión, a veces auto-impuesta, de tener que retribuir con ventas el esfuerzo de una disquera que siempre ha creído en ellos. Además, David Sitek -TV on the Radio, como si hiciese falta aclararlo a estas alturas, pasó su testigo productor al grupo, quien ha logrado filtrarle a su ya místico sonido, un halo de majestuosidad que eleva la experiencia sonora y nos lleva a fundirnos con su psicodelia. Sítaras, pianos, percusión masiva, sintetizadores escondidos y por supuesto, la voz de Katrina Ford; desgarradoramente soul y engañosamente negra, hacen que las 9 canciones de Hello Paradise se conviertan en un corto trip de 38 minutos. 
Quien conozca la divertida demencia de este combo Philly estará de acuerdo conmigo cuando digo que son todos unos ENTERTAINERS que saben cómo mezclar magistralmente la balanza entre música y performance. No es sólo el hecho que su concepto y conciertos sean una especie de experiencia carnestolenda sobrecargada de información vista desde la óptica de unas pupilas dilatadas, sino que la ejecución de sus (múltiples) instrumentos -xilófonos, acordeones, violines, pianos, percusión, guitarras, efectos electrónicos y un sinfin de artilugios musicales más, resulta igualmente intoxicante, halándonos del brazo para meternos en la atracción bizarra de una especie de circo noir donde el vaudeville va de la mano con momentos que terminan siendo más dark de lo que podemos apreciar en la superficie. Como en muchos otros discos de este año, la producción dio como resultado un sonido más limpio que sus entregas anteriores, con más detalles y menos saturación. Pero, para alivio de los que nos consideramos seguidores, los momentos caóticos y esquizoides siguen presentes, de otra manera no serían Man Man. 
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